Plebiscito del 96, 28 años y mucho para contar… (un relato)


Por Rulo Bregagnolo* (14 de abril de 2024, Aristóbulo del Valle, Misiones).

Recuerdo como si fuera a estar sucediendo ahora, porque como hoy, después de tantos años, el 14 de abril también fue un domingo.

Otros tiempos. Meses y días antes de la consulta había mucho movimiento político. En las calles las organizaciones sociales de distintos lugares y sin conocernos como ahora, panfleteábamos de las maneras que podíamos. Sin dinero pero con el aporte de algunas imprentas, comercios y personas, salíamos a las calles, subíamos a los ómnibus de corta, larga distancia y micros urbanos a dejar nuestros volantes donde contábamos “las razones de por qué NO a las represas”. Los Choferes y Guardas eran aliados incondicionales. Entendieron y asumieron que otra vez nos querían engañar con la energía barata, mano de obra y regalías millonarias para “desarrollarnos”.
Nuestros volantes aceptaban automovilistas en los semáforos, en las rutas, personas en las paradas, en las calles. estaciones de servicio, puertas de comercios.

Eran verdaderas “redes sociales”, que las hemos ido tejiendo desde los Movimientos Agrarios, los incipientes Grupos Ecologistas, las Iglesias, el saber indígena, los independientes preocupados. El gran hilo, fue el testimonio de habitantes de las costas con la piel en carne viva por Yacyretá, el “monumento a la corrupción” y el dolor en el alma de los que acababan de aterrizar en nuevos terrenos porque estaban siendo enterradas bajo agua sus historias, sin saber que les esparaba una larga procesión de resarcimientos, de acomodar sus mentes y quehaceres a una nueva y extraña forma de vivir, lejos del río que corría libre y los vio crecer.

Luego de aquella movida ecuménica extraordinaria del 15 de octubre de 1995, que nos congregó en uno de los tramos de un boulevard de la Ciudad de Corpus, la ciudadanía misionera leudó como una masa que sería el pan más sabroso de la resistencia social misionera por años. El otro pan fue en el 2006, que sella y reafirma las convicciones de una sociedad que sabe lo que quiere para su provincia. Por agua y por tierra, en lo que sea de transporte, nos convocamos y por primera vez, la dirigencia política no subió al palco. Ellos abajo y nos debían escuchar!.

Tímidamente la tv nacional publicó la movida náutica y algunas imágenes de aquello en la Plaza. El Premio Nobel de la Paz, Adolfo Perez Esquivel, allí presente junto al corajudo Obispo Joaquín Piña, otros referentes religiosos, agrarios y allí nosotros.
Con muchos no nos conocíamos y ese confluir nos fue encontrando, afianzando confianzas, estableciendo redes, consolidando convicciones y fortaleciendo la resitencia propositiva hacia la libertad de los ríos y el saber que el andar en este camino sería difícil. Había que trabajar el conocimiento y la perseverancia ya que ese río vivo para nosotros es visto como combustible de represas para unos pocos poderosos y sus cómplices en el gobierno.

No dejábamos de movernos desde lo que sabíamos, desde la experiencia de otros, desde el sentido común, desde el amor a Misiones y la defensa de la Vida. Nos fueron conociendo pronto. Los diarios casi no nos daban espacio ni mucho menos la tele. Había que ser estrategas. Y lo fuimos.
Días antes, recibo un llamado telefónico a los de mis Padres y me invitaban al Programa de Canal 13 TN Ecología, conducido por Sergio Elguezábal, porque querían hablar del proyecto hidroeléctrico Corpus Christi. “Sábado 13 a las 10 hs en el canal, puede usted estar?”. Por supuesto!. Me ayudó mi Padre y viajé en un Singer por mi cuenta ese jueves, hotelucho y a esperar. Asistí al horario indicado para grabar y fue interesante conocer a ese Periodista que se animaba a hablar de esto en aquellos tiempos, donde con cierto temor, hasta en las escuelas los Directores nos daban permiso para dar charlas. Aunque hasta hace unos pocos años, la dirigencia política sentía calor y miraba al costado antes de hablar de este tema. Otros ni lo mencionaban.
El programa aquel no fue emitido. A media tarde llamaron a Misiones preguntando si podría volver al canal porque “problemas técnicos no permitieron que se grabe”. (Con el tiempo entendí esos “problemas”…). Finalmente, terminan haciendo una nota en el pasillo que apareció en el noticiero a la noche.

Ese sábado 13, a las 19 hs tenía el regreso hasta Posadas. Ya allí, mientras espero el que venía a Aristóbulo, fui a la paradita de la Uruguay, en la Vieja Terminal, a hablar con la gente que esperaba para ir a votar por su cuenta. Mucha calma, alegría y nada del típico movimiento de campaña. Todos decían “No” y viajé al Pueblito con inmensa alegría, esperanzado que mi voto aquel medio día sumaba a lo esperado.

Voté en la Normal Nº 6, me había puesto una remera pintada a mano que aún la conservo, y decía “Por favor NO más represas que afecten a Misiones”. Un policía se acerca a la fila y me dice que “era voto cantado” y no podía estar con esa puesta. Me saqué, la dí vuelta y con la remera al reves y el pecho hinchado de felicidad, puse en la urna el Voto del NO!, como 9 de cada 10 misioneros, que rechazamos la construcción de la hidroeléctrica ese gran día!.

El resultado fue ratificado por Ley Provincial Nº 3294. Hoy solo derogándola y llamando a un nuevo Plebiscito, pueden volver a intentarlo. Mientras: No es NO!, Y seguirá siendo NO.

Pasaron 29 años y en ese andar, hemos asistido a cientos de reuniones, congresos, aprendido, tejiendo y unido redes acá y allá y más allá, caminado, marchado, remado, pedaleado, pintado, escribiendo, hablando. Muchos medios de prensa han entendido que deben estar a favor del Pueblo y que informar bien educa, sensibiliza. Aquellos esfuerzos colectivos valieron y hoy, más allá de la insistencia e interés económico de algunos, podemos seguir viendo correr libre este tramo misionero del Alto Paraná.

Seguimos firmes y fortalecidos, decididos a sostener las convicciones. El Agua y el Pueblo mandan! Ríos libres para Pueblos Libres!

(*) Miembro del Grupo Ecologista Cuña Pirú, Ong de la Red Latinoamericana de acción contra las represas y de la Mesa Provincial no a las represas. Miembro del Frente Ciudadano Ambiental Kaapuera.

Fotografías: Rulo Bregagnolo.