Palo Rosa (Aspidosperma polyneuron), originario del Bosque Atlántico o Selva Paranaense.Es una especie en peligro de extinción, declarada Monumento Natural en la provincia de Misiones. Su pérdida no solo afecta la biodiversidad del ecosistema, sino también al cambio del paisaje y el encanto de la selva.
Este soberbio árbol es el que alcanza mayor talla en la Selva Paranaense, con ejemplares de 42 metros de altura y 1,60 metros de diámetro.
En Andresito, la familia Waidelich protege un ejemplar de la especie de más de 300 años.
“La propiedad es una herencia de mis abuelos. Cuando adquirieron las tierras, el árbol de Palo Rosa ya estaba allí. Tiene un poco más de 6 metros de diámetros, y de altura se estima supera los 30 metros. Tiene más de 300 años de vida”, señaló orgullosa Verónica Waidelich en una entrevista concedida a Argentina Forestal.