Pamela Colcombet

El Frente Ciudadano Ambiental Kaãpuera lamenta la muerte de Daphne Pamela Cooper de Colcombet (ocurrida el 15 de agosto de 2017), y reivindica su trabajo silencioso en defensa de la Selva Misionera, ponderando uno de sus mayores luchas: la conservación de Sierra Morena, “la madre de todos los arroyos”, como supo describir.

El compromiso de Pamela Colcombet con la naturaleza y su entorno se plasmó a lo largo de toda su vida, mediante diferentes acciones, y tuvo quizás mayor notoriedad con su decidida participación, en la década del 90, en la creación del Parque Provincial Piñalito, a partir de lo cual más hectáreas de nuestro monte quedaban bajo la máxima figura legal de protección.

Entonces, la “misionera” fue nexo entre el Gobierno de la provincia y Terry Moore, aquel hombre bautizado como “El Inglés de la Selva” que compró 3.764 hectáreas de selva y donó (en el año 1997) al Estado para que sean declaradas área protegidas, hoy Parque Provincial Piñalito. A tono, nuestra ambientalista, radicada en Eldorado, también adquirió nueve hectáreas lindantes al Parque y las cedió para que se instale allí un puesto de control del Ministerio de Ecología.

Su rol (antes, durante y después de la creación del Parque) fue de tal importancia que incluso la web oficial de The Conservation Land Trust -organización que desembolsó los fondos para adquirir esas tierras- le dedicó unas líneas: “La exitosa preservación de Piñalito se debe en gran medida al compromiso incansable de la conservacionista y vecina del parque Daphne Colcombet, y a Abel Gerber, el talentoso guardaparques, quien con un modesto presupuesto ha logrado por décadas mantener el parque bien protegido. Tanto Daphne como Abel merecen una tremenda gratitud por luchar batallas sin fin para preservar los bosques y su diversa vida silvestre”, se lee hoy en http://www.theconservationlandtrust.org/

Pamela fue consultada y mantuvo contacto con prestigiosos naturalistas, entre ellos Juan Carlos Chébez; apoyo emprendimientos que fortalecieron la unión entre la familia agraria y el monte, como la producción de dulces con frutos de plantas nativas de la mano de la Fundación para la Conservación de las Especies y el Medio Ambiente; con su conocimiento y con sus registros, aportó a la conservación de especies emblemáticas, como el Águila Harpía, y levantó como estandarte la conservación de Sierra Morena porque, entendía sabiamente, que “es la madre de todos los arroyos en Misiones”. También escribió un libro, “Historias de la Fauna Silvestre de Misiones”, cuyo contenido está orientado a los niños.

Kaãpuera entiende que los pasos en conservación de Pamela Colcombet deben ser imitados y profundizados, principalmente el referido a la defensa de Sierra Morena, localizada mayormente en el departamento de Iguazú (entre las cuencas de los arroyos Urugua-í y Aguaray Guazú); unas 7 mil hectáreas identificadas oficialmente ya en el año 2000 como “una de las joyas de la preservación en Misiones” y que sin embargo hoy carecen de protección. Ocuparnos de este espacio y de las demás Sierras “multiplicadoras de vertientes de agua”, no sólo es una hermosa e inteligente forma de homenajear a Pamela Colcombet, sino una necesidad que se impone ante el visible deterioro de los bienes naturales esenciales para la vida de todos los misioneros.

Agosto de 2017. Misiones, Argentina.